Pecamos de cortoplacismo, somos
así (yo también), somos incapaces de ver más allá de la respuesta inmediata,
queremos beneficios rápidos y si aparece algún problema tirar la pelota hacia
adelante. Somos así, aunque quizás sea pesimismo.
Hace unos meses apareció en los
periódicos una noticia sobre la instalación de un parque eólico en el término
municipal de Tordesillas, concretamente en la Cuesta Carracastro (un cerro
testigo), pensé: “bien, el ayuntamiento recibe dinero, que gastará en alguna
chorrada, se generará algún puestecillo de trabajo, y salvando el impacto
visual y el ruido no se producen excesivos problemas”. Lo que si me extrañaba
es que no se hubiera hablado de esto y prácticamente la gente se enterara
porque salió publicado en el boletín oficial, no le dí importancia hasta que
hubo gente que me habó del yacimiento arqueológico que hay en ese lugar.
Poca gente conocía ese dato, y sigue
sin conocer (o no quiere conocer), pero parece que en Tordesillas tenemos un
auténtico tesoro arqueológico. Carricastro
guarda un asentamiento de la edad del Bronce de más de 1000 años, dónde se han
encontrado restos que datan del siglo XV a.c. Allí, en diferentes prospecciones
(nunca ha habido una gran excavación) se ha encontrado granito del sistema
central y hachas, cuchillos, utensilios y demás objetos de bronce, así como
goterones que señalan que fue un lugar
de fundición de bronce, algo que ya indica la importancia del asentamiento,
pues lo normal era que, en el interior de la Península, al ser zona de menor
contacto entre pueblos, no existiera proceso de creación sino solo intercambio.
Además, si lo unimos al hecho de que en otros yacimientos se han encontrado
apenas cuatro piezas de bronce y aquí han sido más de veinte hace pensar que
podríamos estar en un importante centro económico de la época en el interior peninsular.
Cuando me enteré de todo esto
esbocé una pequeña sonrisa porque pensé “seguro que el primer aerogenerador que
pongan cogen y se cargan un edificio importante, encima de la necrópolis por
ejemplo”. Me entristece, porque al final eso es patrimonio, es una huella de lo
que fuimos, y egoístamente, no atender correctamente esto supone perder mucho
más de los 200.000-300.000 euros que el Ayuntamiento de Tordesillas ganará.
El patrimonio arqueológico,
cultural, histórico… es una posibilidad de desarrollo no solo municipal sino
comarcal, una posibilidad que no nos deberíamos permitir perder. Se trata de un
potencial recurso turístico, bien gestionado y vendido, claro, un reclamo para
el turista que ansía consumir productos culturales diferentes. Es decir, una
posibilidad de introducir dinamismo económico en la comarca, de hecho podría
formar parte de una red de productos patrimoniales,
que a veces se echa en falta dado el empeño de los municipios de no colaborar
entre ellos, la riqueza cultural que tenemos en nuestro entorno es inmensa,
pero la sacamos poco rendimiento. Siempre me ha parecido un “lujo” que no se
pueden permitir el hecho de que todos los municipios alaben su pequeña fuente o
su pequeño monumento pero no sean capaces de colaborar entre ellos para
venderlo dentro de una oferta turística diversa.
Yo no sé si que se contruyan aerogeneradores y que se inicie un proceso de puesta en valor de ese patrimonio que
tenemos en Carracastro es algo compatible. Pero lo que sí tengo claro es que si
no lo es, sitios para poner aerogeneradores hay muchos como para arriesgarnos a
destruir un recurso de esas características. Creo que una puesta en valor de
ese espacio podría introducir un reclamo para visitantes, no solo a Tordesillas,
y eso también generará dinamismo económico, pero sobre todo vida en las calles
y posibilidades de nuevos negocios o que se mantengan los ya existentes.