lunes, 28 de noviembre de 2016

A vueltas con la Despoblación

Parece que la despoblación se está convirtiendo en un problema de primera magnitud para los representantes políticos. Ya era hora. Pero como en todo, lo primero es reconocer el problema, y como las cosas de palacio van despacio, parece que no es inmediato poner soluciones.

Me hace mucha gracia como se afronta el debate. Es cierto que desde las instituciones autonómicas, y desde las diputaciones, se hace más bien poco. Aunque también es cierto, que desde la administración local, faltan ideas y hay cierto conformismo no queriendo ir más allá.

Así que el debate sobre la despoblación se enroca de nuevo en acusaciones partidistas y entre administraciones. Una vez más, también aquí, los encargados de gestionar los recursos se ponen a pensar y solo se les ocurre echar la culpa al contrario.

El PP lleva gobernando, a todos los niveles (autonómico, provincial y local) esta comunidad durante casi 30 años (y me atrevo a decir que viendo las prioridades de la izquierda y su forma de actuar en una Castilla tan conservadora y con tanto desinterés por la política regional, van a ser muchos más años), es lógico que se pueda pensar que algo tienen que ver, y no creo que haya nadie que lo dude. Pero no es el causante de todos los males. Hay que estudiar y analizar la tendencia y los precedentes, así como comprender la realidad para ver que esto es un problema mucho más profundo.

La pregunta, viendo los datos demográficos actuales, y sobre todo la distribución de la población en la Comunidad autónoma es ¿Cómo es posible que hayamos llegado hasta aquí?

Para ello hay que analizar que ha pasado desde principios del siglo XX, partiendo de nuestra posición como región interior española y con gran fuerza agrícola, es decir se ha visto muy afectado por una emigración hacia áreas más urbanas y costeras (o hacia otros países como en el franquismo o en el momento actual) y la mecanización del campo que produjo un éxodo y unas características sociales y económicas en el medio rural que son claves para entender la dinámica demográfica actual.

·         La primera mitad del siglo XX es un periodo donde el crecimiento vegetativo de Castilla y León fue mayor (con permiso de la Guerra Civil) encontrándonos en el periodo con mayor población de la historia, en contraposición con otras comunidades  autónomas donde esa situación se produjo en los primero años del siglo XXI. Aun así, hubo una emigración, más o menos homogénea sobre el territorio, que hizo que las tasas de crecimiento no fueran muy altas. Dicho de otra forma aunque la natalidad se disparó, el crecimiento no fue acusado debido a la emigración.

·         Durante el cuarto tercio del siglo XX se empiezan a producir las diferencias por regiones. Las regiones interiores empiezan a perder población en favor de Madrid y las regiones  costeras. Pero mucho más interesante es el fenómeno del éxodo rural en nuestra comunidad, fenómeno que se va a ir recrudeciendo en los años posteriores y que va a ir configurando el mapa demográfico actual. Un fenómeno que se ve impulsado por el Plan de Estabilización de 1959 produciéndose la mecanización del campo, que expulsa de las áreas rurales a muchos vecinos que acuden a las ciudades a trabajar en la industria. Produciéndose un éxodo rural regional (del medio rural a ciudades próximas industrializadas) y otro nacional (del medio rural a las grandes urbes industrializadas, ya que, no todas las provincias tenían polo de desarrollo. Esto produjo grandes problemas de planificación urbana, pero a largo plazo condenaron al olvido al campo, de hecho muchos municipios fueron desapareciendo.

·         Con la crisis de 1975 se ralentizó la emigración de gente, pero el progresivo envejecimiento de nuestra región afectó a la natalidad, con lo cual el crecimiento demográfico no se recuperó. Además, estamos en la época en la que los avances técnicos y el aperturismo de la sociedad conducen a la “segunda transición demográfica” y a un Régimen demográfico moderno en España, es decir el alargamiento de la vida (en Castilla y león envejecimiento) y la caída de la fecundidad, así como el retraso de la gestación del primer hijo.

·         A principios de siglo XXi se produce una llegada de inmigrantes de otros países que permite paliar la pérdida demográfica, así como rejuvenecer la pirámide demográfica con aportaciones de niños y personas en edad activa. Esta migración se centra más en el mundo urbano, pero también tiene su repercusión en las áreas rurales, donde se registraron incrementos de población a pesar de la pérdida de población autóctona.

·         La llegada de la crisis económica frena este proceso, y agudiza, aún más, la pérdida de castellano y leoneses a otras áreas interiores, más dinámicas, o la “emigración forzosa” a otros países. Lo que en la práctica nos devuelve a una dinámica poblacional, en valores absolutos, pero también espaciales (donde la preocupación en el medio rural debe ser prioridad), que ha sido la tónica habitual desde la segunda mitad del siglo XX.





Teniendo en cuenta lo hasta ahora mencionado, parece claro que, no podemos “regionalizar” el problema. La despoblación es un fenómeno que está interconectado con el dinamismo económico dentro de un mundo globalizado, con unos lazos históricos, con una mentalidad urbana y con una concepción de la política en forma de intereses.

Es por lo tanto un problema innato al modelo de desarrollo que tiene nuestro país, pero es un problema que se ha banalizado frente a otros, posiblemente porque las grandes áreas que sufren esta lacra, han sido silenciadas o lo han visto como algo irreversible y han normalizado la situación.

 Por lo general este problema es abordado desde instituciones y mentalidades urbanas, y por lo tanto pierden perspectiva. Se generan propuestas despóticas que carecen de análisis y de percepción del problema, y que redundan en lo mismo que durante décadas no ha funcionado y que condenan a los pueblos al olvido o a ser un parque temático para los fines de semana.

Desde luego lo que hay de manifiesto es una falta de entendimiento entre instituciones y medio rural. Traduciéndose en falta de empatía sobre el problema, falta de recursos y tiranteces. Para luchar contra la despoblación hay que comprender el lugar donde se produce y por qué, hay que escuchar a quienes lo sufren, y hay que hacerles participe de sus soluciones teniendo capacidad decisoria sobre estas. Hay propuestas para ello... pero eso ya es otro tema.



PD: hay mucho que hablar sobre este tema, esto ha sido fruto de un debate que he tenido el fín de semana (uno de muchos que he tenido), prometo seguir hablando de esto ya sea en otros post o en el mismo en cuanto tenga tiempo para profundizar en ideas, porque es fascinante las propuestas que se han desarrollado y como sociedad demuchos pueblos se resiste. Digamos que este post ha sido una toma de contacto.

miércoles, 23 de noviembre de 2016

Día 25, la necesidad de señalar un problema

Un año más llega el 25 de Noviembre, fecha en la que se conmemora el día contra las violencias machistas. Ya el hecho de haber conseguido un día para su celebración es todo un reto, que muestra lo mucho que se ha avanzado, pero también lo mucho que hay todavía por avanzar.  

Sobre estos actos, y la conveniencia de acudir a ellos, se suscita amplio debate, excesivo para una causa tan clara creo yo. Esto se debe a que, por debajo subyace la idea, bastante extendida, de que sí que existe igualdad. Es uno de los problemas de aprobar leyes sin que haya una opinión mayoritaria a favor. La lógica suele decir que los derechos se consiguen en la calle y cuando la presión es muy grande llega el legislador, siempre “a rebufo”… Pero claro ¿Qué pasa si sobre el papel se conceden derechos y no llegan recursos para llegar a ellos? Pues que es papel mojado…

Una de las críticas a estos actos que me llamó más la atención, me ocurrió el año pasado, diciéndome que si ya había terminado de manifestarme por cosas obvias, porque, ¿Quién no está a favor de q no haya maltrato? Que era de sentido común... No contesté, pero claro, ¿para qué manifestarse contra desahucios? ¿a favor de la educación pública? ¿contra la corrupción? Ect. Es decir, para que manifestarse.

Yo creo en las manifestaciones, pero soy de los que piensa que sin estar en las instituciones es imposible cambiar las cosas. Aunque, ¿Cómo se llega a las instituciones? De ahí gran parte de la importancia de la movilización popular. Ahora bien, y a modo de anécdota, creo que muchas veces tratamos de repetir los mecanismos que nos funcionaron en el pasado (o para colmo, que no nos funcionaron) sin entender que la sociedad ha cambiado (relaciones laborales, tercerización y globalización de la economía, endeudamiento de las familias, capacidad de participación del ciudadano en la política, …) y equivocándonos en las formas.

Ahora bien, hay una cosa que las manifestaciones y las concentraciones no han perdido con el paso del tiempo, es más, con la universalización en el mundo desarrollado del acceso a la información se ha aumentado. Estoy hablando de la capacidad de focalizar un problema, darlo visibilidad, concienciar de ello a la población, y por supuesto, pedir soluciones.

En el caso de la violencia de género, es obvio que existe un problema, porque es cierto que la sociedad mantiene, y transfiere a las generaciones, una serie de valores que hacen que haya una posición de dominancia masculina que en sus situaciones más extremas deriva en violencia física o psicológica, causando incluso la muerte.  Esto es algo común a todas las sociedades, y además, es un indicativo de desarrollo, pues son las sociedades más subdesarrolladas donde la situación de la mujer es de mayor debilidad. Pero en el mundo desarrollado también existen contrastes, al fin y al cabo todos somos fruto de nuestro devenir histórico. En nuestro país, a pesar de que la situación de la mujer siempre ha sido de mayor inferioridad que la del hombre, lo cierto es que el nacionalcatolicismo la otorgó un rol subalterno, donde la violencia de género se entendía como violencia doméstica y se aplicaba aquello de “los trapos sucios se lavan en casa. Esto, a día de hoy, todavía lo estamos pagando, pues aquí también se nota la impregnación de la cultura de la dictadura en la sociedad, haciendo evidente, una vez más, la falta de ruptura con la dictadura.

Contra esas ideas, es contra lo que se lucha. Lógicamente, la llegada de la democracia también supuso la facilidad para transmitir, y hacer llegar a mucha más gente, la necesidad de la lucha por la igualdad, pero también es cierto, que partimos de situaciones mucho más precarias que las de otros países.

Pues bien, por esto hay que manifestarse ese día. Porque hay un problema, porque hay que señalarlo, porque hay que concienciar de ese problema y porque hay que pedir recursos para solucionarlo.


PD: Es interesante siempre ver donde se producen la mayor parte de las agresiones machistas (siempre teniendo en cuenta que no todo se denuncia, y por lo tanto, hay que orientarse). Y eso es algo verdaderamente interesante desde un punto de vista geográfico (sectores degradados vs sectores rehabilitados, áreas urbanas vs rurales etc…)

viernes, 18 de noviembre de 2016

El Autobús de la Discordia

Sorprendido me quedé al escuchar la defensa del alcalde de Tordesillas para justificar que el Ayuntamiento hubiera financiado un autobús a Medinacelli para ver, y dar apoyo, a ese espectáculo marcado por la controversia como es el Toro del Júbilo.

En el municipio de Tordesillas la noticia ha suscitado debate, y no tanto entre taurinos y antitaurinos, sino entre gente que cree conveniente que el Ayuntamiento organice y financie (pues el viaje fue gratuito) este tipo de actos, y gente que no opina lo mismo. Inevitablemente, esto provocó una pregunta en el pleno por parte de la oposición, concretamente del portavoz del Partido Popular, donde señaló que es impropio que un Ayuntamiento financie un autobús para ir a unas fiestas.

Lo extraño, y un poco esperpéntico, fue la respuesta del alcalde para defender esta acción de su equipo de gobierno, comparando esta actividad con la financiación de la piscina cubierta, un viaje anual para la gente mayor que organiza el consistorio, de Motauros o del pago del alumbrado del campo de fútbol.

Cuesta imaginar cual debió ser la cara del emisor de la pregunta, pero está claro que nadie puede estar de acuerdo con la respuesta.

·         En primer lugar, porque organizar un viaje para ir de fiesta es más propio de un grupo de amigos que de la administración. O de asociaciones que promuevan la defensa de determinados valores. Es decir, nadie se hubiera extrañado, ni molestado si el patronato del Toro de la Vega hubiera organizado esta actividad.

·         En segundo lugar porque para temas como la piscina cubierta los vecinos pagan una cuota. Otra cosa es la ruina que significa para las arcas municipales.

·         En tercer lugar porque no podemos comparar el ocio de nuestros mayores, además en dicho viaje habrá actividades culturales, con lo que son las fiestas de un pueblo. ¡Qué se han ganado que estemos atentos a su tiempo libre! Además, es muy criticable intentar utilizar a la gente más mayor como pantalla para defender lo indefendible.

·         En cuarto lugar porque lo que significa Motauros o el equipo de futbol (y sus categorías inferiores) para Tordesillas y para el ocio, y el negocio, de sus habitantes no es comparable con lo que aporta al municipio las fiestas de una localidad situadas a kilómetros de distancia. Además, el deporte es una herramienta, muy saludable, para inculcar ciertos valores a la juventud. No creo que el viaje lo fuera.


·         En quinto lugar porque ya está bien de “rondar la mandarina” con el mismo tema, y quien quiera entenderlo que lo entienda.

·         En sexto, y último lugar, desde el Ayuntamiento deberían pensar si este viaje reporta algún tipo de bienestar a los vecinos, que para eso están. Porque no es por nada, pero creo que todos tenemos claro que las escuelas deportivas, o el equipo de fútbol, son actividades que cubren cuotas de ocio de los más pequeños, y también de los mayores. Hay que tener en cuenta, también, que cuando se desarrollan actividades en el municipio, de todo tipo (y subrayo “de todo tipo”), gusten más o gusten menos, tienen su repercusión en la vida de Tordesillas (en mayor o menor medida).


Lo que quiero decir con todo esto, es que, creo que el Ayuntamiento se equivocó, que esto solo se explica como fruto de una cabezonería, y me parece extraño que no empiecen a pisar el freno con este tipo de cosas que generan estas situaciones. Quizás, la mayoría absoluta ha endiosado un poco al equipo de gobierno. Puede, que por eso no les importe ni siquiera esforzarse en justificar sus actos y den respuestas bastante vergonzosas.  Pero, lo que sí pido, y sobre todo a esa gente que tiene dedicación exclusiva, es decir, alcalde y un par de concejales (ver para creer), es que se esfuercen en sus argumentaciones, que parezca que les importa lo que piense la gente, y no solo los 4 “moscones” de alrededor. 

miércoles, 9 de noviembre de 2016

Trump debería hacer pensar a la izquierda

Me niego a pensar que la humanidad esté condenada a repetir los mismos errores una y otra vez, es tanto como decir que no hay esperanza y, personalmente, todavía soy demasiado soñador y me ilusiono (y desilusiono) con frecuencia.

Parece que cunde el pánico porque movimientos y posiciones vinculadas al conservadurismo empiezan a coger fuerza frente a la crisis y el proceso de globalización, recordando momentos pasados de la historia y comparándolos muy alegremente con la realidad actual, como si no hubiera cambiado nada el mundo…

No me llevo las manos a la cabeza por la elección de Donald Trump, ni mucho menos digo están locos estos Yankees, pero siendo un desconocedor completo de la realidad norteamericana y repudiando parte de su cultura individualista, la cual Trump refleja muy bien, se veía venir algo, quizás no con un proyecto electoral ganador, pero si como movimiento de indignación y hartazgo. En USA la sociedad estaba cambiando y se movía desde hace tiempo, como ha pasado en otros lugares del mundo, o en nuestro país.

Durante las primarias demócratas un amigo que estaba en el otro lado del charco, no precisamente en estados costeros, me comentó que sí que notaba ilusión por Sanders, pero que si este perdía dudaba mucho que Hillary fuera capaz de absorber ese voto y que incluso algunos podrían votar a Trump porque es un voto de rechazo al sistema, es decir a todo lo que representa Clinton. Habrá que ver si esto ha ocurrido, pero es probable que se haya cumplido. Además Hillary, con su poca visión política, que no es extraña para alguien que vive desde hace tiempo en las capas más altas de la sociedad, ha sido incapaz de acercarse a Sanders y hacer gestos hacia él y su electorado.

Muchas veces tendemos a mirar el mundo de una forma muy simplista, y a homogeneizar a toda la sociedad de un determinado lugar. Cuando la realidad es que vivimos en un mundo complejo con un montón de colores (si alguien quiere pensar que todo es una mierda, pues con una gran variedad de grises). Aun así, y sabiendo esto, y sin haber analizado gran cosa voy a realizar una serie de reflexiones al respecto. Lo que es una opinión de bar:

El Brexit, El auge de movimientos populistas a ambos lados del espectro político o ahora la llegada de Trump... tiene mucho que ver con el mundo que hemos creado, y con las consecuencias de la crisis. La globalización, el libre comercio, las guerras… han generado impactos negativos en las sociedades occidentales (también la globalización ha generado cosas positivas, pero no voy a tratar eso ahora) tales como precarización, aumento de la riqueza pero menor distribución de esta, cambios a nuestro alrededor (a lo mejor donde antes estaba la tasca manolo ahora hay un Kebab, o en el colegio al que van nuestros hijos hay una mayor diversidad o nuestras ciudades se han convertido en ciudades grandes que no están diseñadas para el bienestar de la gente común), incluso en algunos lugares altas tasa de inmigración que puede producir, en un corto periodo de tiempo, un cambio muy grande en la composición social de barrios, incluso miedo si se trata de inmigración con una cultura que comprendemos poco como la islámica (como puede suceder en Francia o en Inglaterra, en España la inmigración es más de corte latinoamericano cuya cultura es más parecida a la nuestra y por ello hay menos miedo y más integración al respecto).

Hay que ponerse en el lugar de la persona que sufre esas penurias, que ve como acaba en paro, que ve como el futuro de sus hijos empieza a ser muy negro, que ve como su barrio se transforma en un corto periodo de tiempo… No podemos decir, que esta gente está loca por no querer confiar en lo mismo de siempre, yo no me creo loco por confiar en UNIDOS PODEMOS, y si en otros lugares han surgido movimientos vinculados a la ultraderecha será que a la gente no se la ha dado una alternativa electoral desde posiciones más progresistas como, de momento, está sucediendo en España, y que tiene que ver con factores propios. Se trata, al final, en su conjunto, de movimientos populistas (entiéndase como movimientos que apelan a la gente), que reclaman una soberanía nacional, que rechazan la globalización en mayor o menor grado y que cuestionan unas instituciones que ya no tienen crédito… algo que reclama la calle.

Nos equivocamos si entendemos esto con la clásica, y aburrida, disputa izquierda-derecha. Estos proyectos son proyectos que apelan a otras cosas, aunque tengan el mismo fondo, y que hablan de problemas que surgen en el sistema y que indignan a los ciudadanos y de nada sirve el viejo vocabulario político que no conseguía movilizar a nadie.


Nuevos tiempos, nuevas formas, que no se le olvide a la izquierda o nos pasarán por la derecha. 

martes, 1 de noviembre de 2016

¿Es Pedro Sanchez o es el PSOE?

No vi el domingo la entrevista de Jordi Évole a Pedro Sanchez, el fin de semana hizo que a las nueve estuviera dormido. No tenía pensado verlo, no es alguien que me produzca especial interés, pero al día siguiente en determinados grupos de whatsapp no paraban de hablar de ello, así que el lunes por la noche aparté a Wayoming y su dosis diaria de constructivismo y decidí ver la entrevista a “Ken”. Aclararé, que lo llamo así porque es lo que se vendió. Es decir, se nos vendió desde plataformas mediáticas una imagen, ni siquiera se hablaba de contenido político, solo una imagen (por cierto, las primarias pueden tener esos problemas, nada es infalible).

La entrevista me pareció buena, el entrevistador sacó bastante jugo. El problema es que Pedro Sanchez no tiene credibilidad. Analicemos como ha llegado a salir de Ferraz con los pies por delante. El surgimiento de PODEMOS precipitó un relevo generacional en el PSOE, que para nada fue de formas ni de ideas, había que dar sensación de “nuevo”. Pedro Sanchez ganó las primarias con el apoyo de los principales barones regionales y del grupo PRISA. Durante su gestión como Secretario General se puede decir que ha sido fuerte con los débiles y débil con los fuertes, porque mientras a Tomás Gómez se lo cargó de la forma más antidemocrática posible, Susana Díaz ha podido hacer lo que ha querido, Ferraz era una embajada en Madrid del PSOE Andaluz. Es decir, como modelo de partido, nada cambió.

Desde el punto de vista ideológico, en las primarias se vendió a Sanchez como el sector más próximo a Rubalcaba, y no tardó en dar palos a PODEMOS para satisfacer a la todopoderosa Felipona. ¿Ideas una estrategia para defenderte de PODEMOS sin comprenderlo? Pues dice mucho de él como político, primero de irresponsable y luego de no comprender lo que sucede en la calle. Su actitud defendiendo la unidad de España ha sido más propia de un diputado de la bancada popular que de alguien que defienda un modelo de estado descentralizado.

De pronto nos encontramos con que después de unos malos resultados en Galicia y País Vasco se precipita su caída, y parece claro que era por querer ser presidente por la vía progresista, negociando con PODEMOS y con nacionalistas. Claro, lo que no puedes es vender una cosa y después otra. Si tú eres el candidato centralista y antipodemita, y estás apadrinado por Susana Díaz y todo lo que ella representa, si cambias, pues van a ir a por ti quienes te auparon (barones regionales e intereses económicos).

Pedro Sanchez sabía que en el momento en el que hubiera gobierno, y él no fuera el presidente, dejaría de ser el líder del PSOE y por eso intentó lo imposible. No defiendo que en un comité federal se carguen a un candidato elegido por primarias, y mucho menos que el PSOE otorgue la presidencia del gobierno a Rajoy, pero de ahí a convertir al hijo de Susanita y PRISA en el Che Guevara hay todo un mundo.

Ahora parece que en un gesto quijotesco quiere disputar de nuevo la Secretaría General, pero siendo un candidato que representa algo totalmente diferente (así, en 15 días). Y nos lo tenemos que creer. Lo tiene complicado, pues los tiempos se manejan desde la gestora y, además tiene en su contra a todos los que le catapultaron a lo más alto del PSOE. Además, francamente, no tengo muy buena opinión de la militancia del PSOE, son gente que cansados de la herencia de Zapatero y Rubalcaba votaron a quien representaba lo mismo que ellos, ¡Pero oye!, ¿lo bien que quedaba sus sonrisa como de anuncio de dentífrico en cámara? Quiero decir, que al final se dejarán influir por el “establishment” y votarán lo que PRISA diga.


Pero si se diera la circunstancia de que Pedro Sanchez volviera a salir ¿Cómo va a controlar al aparato del PSOE? Es imposible. Porque la idea fundamental que debe salir de este análisis, no es tanto la poca visión política de Pedro Sanchez, sino como el PSOE tiene una forma de funcionar que es muy difícil de cambiar. Su funcionamiento interno es el propio de los partidos tradicionales, y está acartonado, es decir, en cuanto se quiere cambiar y abrirlo algo a las bases, se cuartea, le salen grietas. Y además, está fuertemente unido a una serie de intereses económicos que impiden que pueda representar ese partido capaz de confrontar la idea territorial y socioeconómica que representa el PP.