jueves, 16 de enero de 2020

De asaltar los cielos a gobernar con la "casta"


No hace tanto PODEMOS surgió como algo nuevo aprovechando la ola de indignación del 15M, hoy forma parte de un gobierno de coalición presidido y con mayoría de carteras del PSOE, partido más representativo del modelo surgido con la Transición.

La pregunta entonces es ¿Qué ha pasado? Algunos dirían que en PODEMOS se han hecho mayores, y posiblemente sea verdad, pero desde mi punto de vista lo que han cambiado son las circunstancias. No estoy seguro de que el ciclo de impugnación abierto por el 15M se haya cerrado, de hecho creo que la crisis territorial abierta por Cataluña que, ha supuesto el crecimiento del nacionalismo español, lo ha reorientado hacia posiciones más conservadoras quitando del foco mediático los problemas sociales que aún siguen existiendo y que siguen en la base del descontento.

A partir de aquí podemos señalar errores cometidos, y  posteriormente magnificados por los medios de comunicación, como problemas en la organización interna, alianzas con otros partidos (opinable), decisiones personales que podrían tacharse de hipocresía, luchas internas… pero no se puede perder la perspectiva de que la orientación del descontento que dio origen a PODEMOS ha cambiado.

Frente a esto tenemos un PSOE que se ha rearmado, con turbulencias internas (el PSOE es un partido que las absorbe muy bien), pero que ha sabido recomponerse. Por lo tanto ya es imposible ese “sorpasso”

A partir de aquí surge la duda que siempre ha caracterizado a la izquierda institucional ¿Oposición frontal o colaboracionismo? Algo, que en mi opinión, depende también de las circunstancias. No hubiera sido razonable no intentar conformar un gobierno progresista para dar solución a los problemas sociales y territoriales desde la izquierda, cuando las posiciones estén tan polarizadas y el nacionalismo español y reaccionario tan exaltado. Pero para ello el PSOE, que es el único capaz de liderar esas soluciones, debe ser arrastrado hacia la izquierda. No había, pues, otra salida que el gobierno de coalición.

A partir de aquí, lo que debemos esperar de este, es fundamentalmente que no haya retroceso de derechos sociales y laborales, creo que podemos estar de acuerdo que la presencia de Unidad Podemos es una garantía, sobre todo de lo segundo. Además, en la medida de lo posible aumentar esos espacios de libertad y justicia social.

Posiblemente todos soñamos con asaltar los cielos, pero la realidad actual es otra.